miércoles, 19 de noviembre de 2008

El lugar con el que sueño es pequeño y está vacío. No hay paredes ni techo que lo acoten. Está hecho de sensaciones nuevas y fugaces que me recuerdan a otras sensaciones posiblemente no vividas. Es efímero y goza de una desubicación que le salva de cualquier previsibilidad. Es una casa de colores anaranjados o un rayo de luz diferente a cualquier otro. El viento sentido en cada célula o un pensamiento indescrifable que me sume en una perplejidad gozosa.
No tengo ni puta idea con qué clase de lugares sueño.

No hay comentarios: